La duración de la jornada laboral es uno de los aspectos básicos que debemos conocer en cualquier puesto de trabajo que desarrollemos. Todos sabemos que la jornada habitual en España es de 40 horas semanales, esto es, 8 horas al día. Pero muchos se preguntan, verdaderamente, cuántas son las horas máximas de trabajo que podemos realizar. La normativa admite ciertas particularidades que iremos viendo en este artículo para resolver las dudas.
¿Qué dice el Estatuto de los Trabajadores sobre las horas máximas de trabajo?
Si consultamos con el Estatuto de los Trabajadores acerca de la duración de la jornada de trabajo, debemos irnos al artículo 34. En él establece que “la duración de la jornada de trabajo será la pactada en los convenios colectivos o contratos de trabajo”. Aunque, también deja constancia de la llamada jornada ordinaria a la que estamos habituados encontrar, donde se establece que “será de 40 horas semanales de trabajo efectivo de promedio en cómputo anual”. Estamos hablando de que esta limitación se establece en las jornadas laborales a tiempo completo.
El Estatuto de los Trabajadores establece que en España el límite de hora efectivas trabajadas son nueve horas. Pero esto no puede aplicarse a los menores de edad, donde su límite de horas diarias trabajadas será de ocho horas, incluyendo en ello el tiempo de formación.
Además de que un empleado no pueda superar más de 9 horas de trabajo al día, en cuanto a las horas extraordinarias, estas no pueden exceder de 80 horas al año.
Entonces, ¿la duración máxima puede ser de más de 40 horas a la semana?
Si la normativa establece que la jornada laboral en España es como máximo 40 horas semanales, ¿quiere esto decir que no se pueden trabajar más horas durante la semana? No. Esto es debido a que la ley fija que las 40 horas semanales son un promedio en cómputo anual. Por lo tanto, debemos ver que no se superen al final del año ese límite de las 40 horas semanales.
El empleador, previo acuerdo con los representantes de los trabajadores, puede distribuir las horas de trabajo de forma irregular. O también puede ser que lo marque el convenio colectivo que tenga en cuenta la empresa.
¿Y en los trabajos con jornadas especiales?
Existen trabajos que, debido a su naturaleza, se necesitan realizar jornadas laborales especiales. Con ello nos referimos a la hostelería o los servicios públicos. En estos casos, estas jornadas pueden ampliarse o reducirse según sea la naturaleza del trabajo.
Ten en cuenta los periodos de descanso en la jornada laboral
Siempre deben respetarse los descansos mínimos establecidos entre el final de una jornada laboral y el comienzo de otra. Este descanso debe ser, como mínimo, de 12 horas, según estipula el Estatuto de los Trabajadores y los distintos convenios colectivos. La normativa también establece que, si la duración de la jornada diaria de trabajo es superior a seis horas, debe establecerse al menos un periodo de descanso no inferior a 15 minutos, tratándose de un descanso obligatorio.
Cómo llevar un control de las horas máximas de trabajo
Como vemos, gestionar las horas de trabajo implica tener en cuenta el máximo de horas semanales, las horas extras, que no se supere el cómputo de horas máximas en el año y respetar los descansos que estipula la normativa. Gestionar todos los factores teniendo en cuenta a cada empleado que compone nuestra plantilla, supone largas horas de planificación que se verán aumentadas ante cualquier imprevisto como las ausencias, cambios de turno o las vacaciones.
El registro de jornada, además de ser de obligatorio cumplimiento, existen otras muchas razones por las que tu empresa debería estar aplicando la ley de fichar en el trabajo. Utilizando una solución destinada al control horario de empleados, podremos contar con todas las herramientas necesarias para que no se nos pase nada en la gestión de las horas de trabajo. Entre ellas, el saldo de horas automático, que permitirá al responsable y a los empleados llevar un control exacto entre las horas de trabajo planificadas y las horas trabajadas, donde se controle el exceso o defecto de horas fichadas. Así será mucho más sencillo conocer el número de horas que realiza el empleado con una visión diaria, semanal, mensual y anual que permita no alcanzar el máximo de horas de trabajo permitidas.