Seguro que has oído más de una vez el término y sabes, más o menos, qué es la cultura organizacional. Las empresas cada vez están más concienciadas de la importancia que tiene su desarrollo para la plantilla y para captar nuevos talentos. En este artículo vamos un paso más allá para conocer más acerca de las funciones de la cultura organizacional. Esto nos ayudará a definirla en nuestra compañía de forma correcta y conocer qué puntos no debemos pasar por alto en su desarrollo.

Qué significa la cultura organizacional

Todas las empresas se sustentan bajo una serie de principios que forman parte de su propia personalidad y valores. Aquí se encuentran también las bases de sus procesos, normas y actitudes por los que se rige la compañía.

A nivel interno, esta cultura organizacional ese esencial para establecer la forma en la que se relaciona la plantilla y la empresa con sus trabajadores. Además de fijar las políticas de bienestar de la empresa y cómo debe ser el clima laboral presente en el centro de trabajo.

A nivel externo, la cultura organizacional es clave de cara al exterior. Por ejemplo, en lo referente a la imagen corporativa, ya que se determinan cuestiones como su filosofía ecológica o el compliance ambiental o si participa en actividades de caridad.

Como vemos, la cultura organizacional cobra especial importancia si queremos cuidar lo que transmitimos hacia nuestros clientes o hacia los propios trabajadores. Para ello es fundamental que sea coherente, así será más probable que de forma externa o interna se puedan sentir identificados con lo que esta transmite socialmente.

Aspectos que conforman la cultura organizacional

Existen multitud de componentes que pueden entrar dentro de la cultura organizacional de una compañía. Pero es importante que toda empresa establezca cuáles son aquellos componentes básicos o esenciales que deberá cuidar, desarrollar y priorizar en todo momento. Estos son:

• Las normas que establece la empresa
• Los valores de la compañía
• La estructura organizacional y de poder
• El tipo de liderazgo empresarial
• Las relaciones de la plantilla

Funciones de la cultura organizacional

Una vez teniendo clara la definición y los aspectos que la conforman, podemos comenzar con las funciones de la cultura organizacional.

Seguridad

Aporta seguridad en la empresa al establecer qué normas deben seguirse. Esto ayudará a no perder el rumbo y evitar tendencias indeseables que recibamos externamente.

Identificación de los trabajadores con la empresa

Los empleados se sienten más integrados e identificados. Podemos lograr que todos se sientan parte de un todo dentro de la empresa al estar correctamente establecidos sus roles.

Comunicación interna

Mejorar la relación y comunicación interna entre los empleados. Si tenemos bien definida la cultura organizacional los trabajadores tendrán más claro qué es lo que se espera de ellos, cuáles son las normas que deben cumplir.

Configurar las políticas de empresa

Además de fijar los paradigmas fundamentales a los que podemos enfrentarnos. Esencial para tener las bases que podremos seguir frente a cualquier imprevisto o problema que surja en cualquier momento.

Fijar nuevas metas

Teniendo detallada la cultura organizacional de nuestra compañía por escrito será de gran ayuda para establecer nuevas metas tanto internas o externas. Detenernos a repasar los principales puntos y pensar en mejoras fomentará su propio desarrollo.

Integrar los procesos

Al quedar definidos los principales procesos de la compañía esto ayudará a resolver los distintos problemas que pueden surgir en la empresa y entre la plantilla sobre las diferentes actividades que cubre la empresa.

Establecer los criterios y reglas de acción

También se fijará cuál es la forma de actuación que seguirá la plantilla y la compañía en general. Así como los manuales de operación, guías de trabajo y otros criterios que permitirán mejorar el desempeño laboral.

Mayor adaptabilidad de los nuevos trabajadores

Dejar clara la cultura organizacional de la empresa desde el propio onboarding de los empleados permitirá que se adapten mejor en la empresa y comiencen a ser productivos en menos tiempo.

Mejor orientación al consumidor

Otra de las funciones de la cultura organizacional es enfatizar al consumidor como valor declarado de la compañía. De manera externa también podrá llegar estos valores y visiones de la empresa con la intención de hacer partícipe al cliente.

Como vemos, la cultura organizacional es de gran ayuda para que las empresas encajen en el contexto de la sociedad, así como definiendo las relaciones a nivel interno y externo de la compañía.

Qué tener en cuenta para el desarrollo de la cultura organizacional

Debemos tener claro que todas las empresas tienen su propia cultura organizacional, pero no todas emplean esfuerzos para desarrollarla. De nada servirá si tenemos la misma cultura que cuando se fundó la empresa.

Para comenzar con su desarrollo es importante empezar realizando un análisis de los valores de la compañía adaptándolos a la situación actual en la que se encuentra. Tras ello, redefinir los valores será esencial, sin olvidarnos de comunicarlos después a nuestra plantilla y a los propios clientes.

SI buscamos inspiración para definir estos nuevos valores de la empresa podemos ayudarnos de distintos ejemplos de cultura organizacional. Viendo cómo otras grandes compañías han configurado su cultura puede darnos las píldoras esenciales para saber qué queremos o qué no queremos hacer con la nuestra.

Sobre el autor

Tamara Vargas

Periodista Digital aficionada al mundo de la tecnología y de la comunicación.